La Fundación Ford
anunció ayudas financieras especiales por US$4,5millones junto con un
programa de actividades, para conmemorar su 50o. aniversario en Latinoamérica,
región que está floreciendo y creciendo, pero que todavía se esfuerza por
profundizar sus democracias y por incluir a todos los pueblos en los beneficios
del crecimiento.
Los financiamientos
representan proyectos respaldados por las tres oficinas de la fundación en la
región, que abarcan el Brasil; la Región Andina y el Cono Sur; y México,
Centroamérica y el Caribe.
"Las organizaciones que
apoyamos en las décadas de 1970 y 1980 jugaron un papel central en la defensa
contra los abusos en los derechos humanos y en la lucha por la democracia
durante ese período", dijo Luis A. Ubiñas, presidente de la Fundación
Ford. "Nuestra labor hoy se centra en asegurar que todos los pueblos
puedan contribuir y beneficiarse con el crecimiento de la democracia y de la
prosperidad que ahora caracteriza gran parte de la región".
El paquete de aportes
especiales –además de los casi US$40 millones que la fundación
invierte en la región cada año – fortalecerá los esfuerzos para construir la
inclusión, ampliar las oportunidades, propiciar la expresión cultural,
profundizar la democracia y fortalecer los derechos humanos, temas que han sido
hitos del apoyo de Ford para las organizaciones latinoamericanas durante cinco
décadas.
"Nos sentimos honrados
por formar parte de la escena de la sociedad civil en Latinoamérica por 50
años", dijo Ubiñas. "Quienes han recibido nuestros aportes en la
región han sido, y continúan siendo, valientes líderes que han ayudado a crear
la Latinoamérica vibrante y fuerte que hoy vemos".
Los financiamientos apoyarán
a organizaciones en toda la región. Entre ellos, se encuentran:
US$1,35 millones para
hacer progresar el desarrollo equitativo y sustentable mediante el apoyo a
organizaciones que trabajan en ciudades justas y sustentables, los derechos
relacionados con los recursos naturales y una rendición de cuentas más sólida,
todo esto organizado con miras a la próxima conferencia Río+20.
US$500.000 para apoyar
las artes a través de Voces de Latinoamérica, festival que celebra la música y
la cultura latinoamericanas en Carnegie Hall; y US$250.000 para el
Museo de Artes y Diseño de Nueva York a fin de que explore los nuevos
talentos artísticos que emergen de Latinoamérica.
US$2 millones para, por
lo menos, tres organizaciones latinoamericanas a favor de los derechos humanos
para ayudarlas a que crezcan de ser grupos regionales a ser líderes globales
con voz en el escenario global de los derechos humanos.
US$450.000 para apoyar
actividades especiales en México y en El Salvador que aborden la
pobreza y promuevan los derechos de las mujeres y de los pueblos aborígenes.
La fundación ha invertido
cerca de US$1.000 millón en Latinoamérica desde 1962, y se ha
centrado principalmente en hacer progresar la educación superior, construir la
sociedad civil, luchar contra la pobreza y promover los derechos humanos y la
democracia.
En los últimos años, la
fundación ha puesto énfasis en los esfuerzos locales por abordar cuestiones
relacionadas con la migración, la discriminación, la condición legal de los
aborígenes y de los descendientes africanos, y los derechos relacionados con
los territorios de la comunidad y los recursos.
Durante todo el año, la
fundación organizará una serie de eventos para construir el diálogo en torno a
cuestiones clave que enfrenta la región. Entre estos eventos, se encuentran un
simposio en Río de Janeiro centrado en la prosperidad y en la democracia en
Latinoamérica, una serie de conversaciones en México sobre la migración, y una
conferencia regional en Colombia para explorar la influencia de las
industrias extractivas en el bienestar de las comunidades de los países
andinos. La fundación también organizará exposiciones de fotografía, arte y
películas en México, Chile y el Perú.
En un año típico, cada una
de las oficinas regionales de la fundación asigna entre US$12 y US$15 millones
en financiamiento para organizaciones latinoamericanas que trabajan en
cuestiones nacionales y regionales apremiantes.
