Naciones Unidas y Agrinos se unen en pro del medio ambiente

Karl Fick, Agrinos

Además de unirse al tema de “Economía verde”, presentado por el Programa de las Naciones Unidas con motivo de la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente el próximo 5 de junio, Agrinos sostiene que “son necesarias la investigación y el desarrollo de biotecnología de alto rendimiento para el sector agrícola”, afirmó  Karl Fick, socio fundador de la empresa.

La Economía verde la ha definido el Programa de las Naciones Unidas, como el resultado mejorar el bienestar humano y la equidad social, reduciendo significativamente los riesgos ambientales y el daño ecológico”.

“El tema es interesante y en ello hemos venido trabajando durante los últimos 20 años. En AGRINOS desarrollamos HYT, una exclusiva tecnología de alto rendimiento, producto de años de investigación, desarrollo e implementación de insumos 100% naturales a base de enzimas, microorganismos y materiales orgánicos tales como aminoácidos, quitina, quitosano y glucosamina”.

Gracias a esta tecnología y midiendo la  productividad, calidad y competitividad de los cultivos,  como maíz, soya, trigo, sorgo, algodón, caña de azúcar, árboles frutales, flores, cereales, tabaco, palma africana, yuca, batata, hortalizas y demás tubérculos, los resultados han sido altamente significativos en Colombia y varios países de África, América, Asia y Europa”, explicó el doctor Fick.

Según el Programa de las Naciones Unidas, “el dilema al que nos enfrentamos entre la actual  economía "marrón" y una nueva propuesta de economía verde, se ilustra mejor a través de un influyente artículo publicado en 1968 por Garrett Hardin, La Tragedia de los Comunes”. El escrito describe  un pastizal común en el cual varios agricultores llevan su ganado. Con el fin de aumentar la riqueza individual, cada uno amplía su rebaño, pero continúa en el mismo pedazo de tierra. El suelo comienza a deteriorarse y no hay renovación ni cuidado. Como resultado, la producción disminuye y se acaba el negocio.

Problema y soluciones

“Esta tragedia ya tiene visos mundiales. La agricultura es la industria más grande del planeta. Para aumentar la producción existe el uso irracional de fertilizantes químicos que causan fuerte degradación en el suelo, aire y agua. El 70 por ciento del agua dulce del planeta se utiliza para actividades agropecuarias, la deforestación es responsable del 18 % de emisiones globales y desde 1945, la extrema o grave degradación del suelo ha afectado un área más grande que la India y China juntas. Entre el 2006 y 2009, la hambruna en el mundo se incremento en 150 millones de personas, como resultado de los  altos costos de producción agrícola y a hoy siguen en aumento, explico el doctor Fick.

“Existe ahora un Incremento de patógenos.  Hay mayor dificultad para la obtención de tierras y las prácticas industriales de la agricultura están directamente relacionadas con el incremento en plagas y el uso de pesticidas. Además, el uso de monocultivos incrementa las plagas ya que se elimina la biodiversidad y se exterminan los depredadores naturales existentes en los suelos sanos. Por lo tanto, el uso indiscriminado de pesticidas, ha venido acabando  con la  biodiversidad,  produciendo los efectos negativos  para  la salud humana, que todos conocemos, agregó.

“El mal ha llegado al mar. El fertilizante que se desperdicia termina allí y  reduce los niveles oxígeno, afectando igualmente la biodiversidad, los suelos coralinos y el alimento marino.  El número de zonas muertas se ha ido duplicando cada década desde 1960. Hoy en día las zonas muertas cubren un área en el océano tan grande como el tamaño del Reino Unido”, complementó. Las condiciones climáticas extremas se empeoran y se  espera tener pérdidas en rendimiento de un 13% para el 2050. Las peores serán en áreas tropicales, subtropicales y países en el mediterráneo.  “En AGRINOS elaboramos productos de origen orgánico, no tóxico, que benefician  la cadena de valor, desde el  productor, distribuidor  hasta  el consumidor”, dijo.

“Nuestra propuesta es que haya atención por parte de los gobiernos, de los entes encargados de la legislación y supervisión del uso de los suelos para que aumente la productividad, pero sin el uso de químicos que los degraden”, manifestó.